Una vez más, la Secretaria de Estado Hillary Clinton lanza amenazas contra el gobierno sirio al declarar en una rueda en Groenlandia que la represión de las manifestaciones en Siria es “un signo de gran debilidad” y no de poder.
Las declaraciones podrían constituir una amenaza, abriendo un camino político que justifique una invasión como hace pocas semanas ocurrió con el caso de Libia.
Hillary Clinton, que participó en un encuentro con la prensa junto a su homóloga danesa Lene Espersen, se encuentra hasta el jueves en la noche en Groenlandia, para una reunión de ministros de Exteriores del Consejo Ártico.
El Gobierno de China, por su parte, pidió a la comunidad internacional que no interfiera en los asuntos internos de Siria, país que desde marzo pasado enfrenta protestas a favor y en contra del Ejecutivo. Abogó por una salida pacífica en esa región y confía en que lo pueda lograr a través del diálogo.
La portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Jiang Yu, manifestó este jueves que “esperamos que el país mantenga la estabilidad e instamos a las partes a resolver las diferencias mediante el diálogo político y a evitar el derramamiento de sangre”.
“Las fuerzas exteriores no deberían intervenir en los asuntos internos de Siria para evitar complicar la situación”, reiteró la vocera de la Cancillería.
La Unión Europea (UE) aprobó el lunes un primer paquete de sanciones contra Siria que incluye el embargo de armas y material que pudiese ser usado para la “represión de la población”, además de la congelación de bienes y la suspensión de la visa comunitaria para 13 altos funcionarios del Gobierno de Damasco.
“El Consejo europeo adoptó una decisión que impone un embargo sobre las exportaciones hacia Siria de armas y de materiales que puedan ser utilizados en la represión de la población”, indicó la UE mediante un comunicado fechado en Bruselas.
Fuente: Patria Grande / Agencias
No hay comentarios:
Publicar un comentario