Chavez en la web

jueves, septiembre 18, 2014

OPINIÓN / El “Sacudón” y sus efectos


*Miguel Ugas

El Presidente Nicolás Maduro, en cadena nacional, presentó al país el nuevo diseño de la estructura gubernamental, que, con antelación, venía anunciando con el sugestivo nombre del “Sacudón”, y que en las primeras de cambio, de acuerdo con las reacciones que ha suscitado, dejó claro y sin vistas a más de uno; a diversos sectores, tanto de la oposición como, incluso, a algunos relacionados con el chavismo, que esperaban, desde sus distintas ópticas, que los anuncios estuviesen orientados, básicamente, al área económica más a que a lo político como terminó resultando. Es decir, el sacudón del Presidente produjo unos efectos que luce pertinente precisar.

En el campo opositor-empresarial

Sectores políticos opositores y empresariales, incluyendo los sempiternos sesudos analistas, desde hace varios meses, han venido tratando de posesionar, apoyados en la amplia plataforma mediática que tienen a su disposición, la matriz de que el país está sumergido en una profunda crisis económica como consecuencia de las desacertadas políticas que en ese ámbito ha venido desarrollando el gobierno bolivariano; desaciertos, que, según los oráculos de la oposición, estuvieron presentes desde los primeros años con la conducción del Comandante Chávez y que, ahora, con Maduro, sencillamente, se han acentuado.

Aunque es evidente que algunos de estos sesudos analistas, taimadamente, han pretendido excluir a Chávez, de cualquier responsabilidad, partiendo de la alta consideración e identificación que mantiene el pueblo venezolano con el líder histórico del Proyecto Bolivariano. El peso de la carga se le pretende atribuir a Nicolás Maduro.

En este sentido, se aduce que el control de cambio, si bien pudo haberse justificado en un primer momento, cuando se instrumentó, a estas alturas, resulta totalmente contraproducente, pues, se ha convertido en un factor distorsionante de las relaciones económicas, producto de la discrecionalidad y liviandad de los funcionarios encargados de administrar las divisas, obstaculizando, de esta manera, el acceso a las mismas, y, por tanto, la importación oportuna de productos de consumo, de bienes de capital o de insumos necesarios para la operatividad de las empresas, afectando la productividad y la capacidad productiva y creando una situación de escasez y de aumento de los precios de las mercancías, que conlleva, forzosamente, a la inflación incontrolada y a la avidez por el dólar paralelo.

Así como, también, arreciaron una campaña en contra de la participación del Estado en la economía y, en particular, en contra del control de precios y de la regulación de las relaciones laborales, sin dejar de manifestar la consabida preocupación por la gran inversión social que se ha venido haciendo durante el período chavista en beneficio de las grandes mayorías nacionales, pero, que, a juicio de la derecha empresarial conlleva a un despilfarro de recursos, además, de la implícita carga inflacionaria que contiene producto del excesivo circulante que pone en la calle .

Es decir, en líneas generales, la derecha se lanzó de lleno en contra de los lineamientos económicos-sociales del chavismo en la idea de que al gobierno bolivariano no le quedaba otra alternativa que plegarse a la supuesta racionalidad que pregonaban los más altos voceros del empresariado representado en FEDECÁMARAS y en los grandes monopolios.

En dos platos, esperaban que el sacudón de Maduro estuviese dirigido a eliminar el control de cambio, a liberar los precios, a reducir las Misiones Sociales, a flexibilizar la Ley del Trabajo, a reprivatizar algunas empresas y servicios, e incluso, a que se concertaran nuevas relaciones con el FMI; aspiraban lograr algo así como la deposición del Proyecto Bolivariano y Chavista, que, por supuesto, no han podido alcanzar por la vía de la derrota política, pero que ahora pretendían a través de la celada que han venido montando con la guerra económica y la manipulación mediática y psicológica.

Pensaron que Nicolás Maduro y la dirección revolucionaria estaban desorientados, dispuestos a escuchar los cantos de sirena que le venían mostrando en la reciente tormentosa travesía.

En sectores del chavismo

Igualmente, en sectores vinculados, de alguna forma u otra, al chavismo, también causó su efecto los nuevos lineamientos señalados para el funcionamiento y operatividad del gobierno y del Estado. No han terminado de entender lo que reiteradamente ha planteado Nicolás Maduro, como conductor del Movimiento Chavista: que el único compromiso que tiene este gobierno es con el pueblo, que sólo a él se debe y que sólo a él se somete.

Al no entender o no asimilar este postulado, terminan, sin querer, coincidiendo de hecho, con los enemigos del proceso revolucionario, es por ello que algunos hablan de una supuesta desviación socialdemócrata y de tender a conciliar con la burguesía parasitaria; mientras otros, desde otro ángulo, plantean incluso la necesidad de la formación de un gobierno de consenso con factores de la oposición, sin comprender que esta, en su conjunto, tiene un objetivo estratégico definido, que es el de derrocar y extinguir el Proyecto Bolivariano y Chavista y que sus diferencias están situadas únicamente en el orden táctico, en el cómo alcanzar tal objetivo.

El pueblo chavista

Por el contrario, el pueblo chavista si entendió, sin mayor confusión, la nueva orientación de funcionamiento que se le va a imprimir al gobierno y al Estado en esta nueva etapa, con: las cinco Revoluciones enmarcadas en el Plan de la Patria concebido por Chávez, con las seis Vicepresidencias de áreas y con los Consejos Presidenciales de Gobierno Popular, que, a nuestro entender, constituyen un paso altamente significativo en la orientación que sustenta el proceso revolucionario venezolano de la participación y protagonismo popular a través de los Movimientos Sociales.

El pueblo está llamado a hacerse, cada vez más, parte activa de la acción de gobierno; he allí el condicionante para avanzar con rumbo fijo hacia la sociedad socialista.

*miguelugas@gmail.com

Che Guevara & John Lennon. Imagine ?

LENNON Y VICTOR JARA MANIFIESTO

Lorent Gómez Saleh se formaba para ser paraco (+Fotos)

Apoyado por ex presidente colombiano Uribe Vélez

ARTÍCULO | SEPTIEMBRE 18, 2014 



Lorent Gómez Saleh con su mentor el ex presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez/ Foto: Cortesía

Yvke Mundial/ CCS

El joven Lorent Gómez Saleh se define en Facebook como “asesor en Asuntos Latinoamericanos, promotor de la Libertad, la Seguridad y los Derechos Humanos y presidente de la ONG Operación Libertad Internacional (que cuenta con voceras como María Conchita Alonso)”.

Antes perteneció al grupo de ultraderecha Juventud Activa Venezuela Unida (JAVU), que nació bajo el financiamiento de Henrique Salas Römer y ha establecido nexos poderosos con el expresidente colombiano Álvaro Uribe y representantes de su Centro Democrático, en especial, la senadora María Fernanda Cabal.

Las huellas de estas relaciones se muestran en sus redes sociales, pues como escribió en su cuenta de Instragram, @lorent_saleh, “ni la agenda es oculta ni estamos detrás de nada, vamos de frente contra los criminales vestidos de poder”.

Esos planes de "ir de frente" contra el Gobierno Bolivariano fueron tomando forma de “Casa de Formación Libertaria” para jóvenes colombianos y venezolanos.

“Con nuestras propias manos levantamos una casa en la frontera, una casa para dar refugio y formación a los jóvenes de Venezuela y Colombia. OPERACIÓN LIBERTAD”, escribió en junio de este año.

En esas reuniones las pizarras se ven llenas de listas de “lo que falta”, como si de un comando estratégico se tratara, y las computadoras portátiles que usan están adornadas con las calcomanías de la campaña del excandidato presidencial colombiano Óscar Iván Zuluaga, pupilo de Uribe.

La relación con el exmandatario colombiano viene desde hace tiempo, incluso en marzo Gómez Saleh publicó en facebook una fotografía de Uribe a la que le agregó el comentario: “Acompañamos a Álvaro Uribe Vélez en la Convención del Centro Democrático. Eternamente agradecidos por el apoyo que siempre le brinda a nuestro pueblo”.

Las acciones a tomar se fueron definiendo y a finales de junio el director ejecutivo de Operaciones, Gabriel Valles, expuso su visión para los próximos meses: “En Operación Libertad Internacional nos preparamos para formar las nuevas generaciones”. Siguió una visita a la Embajada Americana de la que da cuenta una foto publicada el 11 de julio: “7 años de ensayos y errores, de aprendizaje y organización”, escribió.

Formación en Colombia

El lobby en Colombia se incrementó desde el 19 de julio: estuvieron presentes en la conmemoración del Día del Héroe de la Nación, donde se fotografiaron con representantes de las Fuerzas Armadas de ese país, activos y retirados.

Buscaban formación militar para arreciar sus planes cuando volvieran al país y esa necesidad los llevó a ingresar de forma fraudulenta a la Escuela Superior de Guerra de las Fuerzas Militares. Se quedaron en el edificio de la Fundación Colombia Herida, que trabaja “con los miembros de la Fuerza Pública heridos en combates, sus familias y las familias de los caídos”.

Orgulloso de su logro Gómez Saleh publicó una imagen en la entrada de la institución. “Hoy, luego de años de trabajo y sacrificios, nuestra organización Operación Libertad Internacional cuenta con cuatro de sus miembros de Colombia y Venezuela, preparándose para la Seguridad y la Defensa de nuestra querida América”, apuntó.

Sin embargo, el general Javier Fernández, director de dicha escuela, en una entrevista concedida al diario El Tiempo el 10 de este mes, afirmó que los jóvenes se hicieron pasar por estudiantes de la Universidad Sergio Arboleda.

“Al ver que no traían ningún documento, inmediatamente en la segunda clase el señor Gómez fue sacado de la clase y se le dijo ‘tiene que matricularse’. Su respuesta fue que iba a traer los documentos y nunca apareció”, detalló el general.

Derecha venezolana activa

Cuando fueron expulsados de Colombia a principios de septiembre la derecha venezolana activó su maquinaria mediática para ir en su defensa. Aunque uno de los primeros en reaccionar fue Uribe, en Venezuela le siguieron los opositores Antonio Ledezma, Diego Arria y María Corina Machado.