Caracas, 14 Jul. AVN .- El ministro para las Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, destacó que durante el proceso de intervención de los centros de reclusión de El Rodeo I y II, ubicados en Guatire, estado Miranda, nunca se planteó el ingreso de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) de manera violenta.
“Nunca estuvo planteada la intervención a sangre y fuego”, aseveró el ministro este jueves en una entrevista en el programa Toda Venezuela, trasmitido por Venezolana de Televisión (VTV).
Detalló que la GNB aplicó el uso progresivo y diferenciado de la fuerza para garantizar la vida de los internos.
El Aissami resaltó que durante los 27 días en el que las mafias carcelarias de El Rodeo II mantuvieron amenazados a un grupo de privados de libertad, el Estado venezolano no renunció al ejercicio de la autoridad legítima para ejercer el control del penal.
Cuestionó la cobertura periodística de los medios de comunicación privados durante la operación, además señaló que la prensa intentó manipular a los internos con información falsa.
“Los medios cuando se dieron cuenta de que fue una operación apegada a los derechos humanos y resguardando la vida de los presos, comenzó una manipulación a los internos suministrándole información de que habíamos asesinado a los internos de El Rodeo I”, criticó.
Al ser consultado sobre la fuga de un grupo de reos, el ministro indicó que varios factores favorecieron las condiciones para esta evasión, como la retirada de funcionarios heridos por los internos en las garitas y la restricción del servicio de electricidad que dificultó el alumbrado perimetral para la vigilancia.
“La seguridad nunca disminuyó, sino que fue retirada. No había suficiente proximidad para la vigilancia del cerco perimetral, se valieron de muchos factores y se evadieron varios internos”, explicó.
Señaló que los organismos de seguridad están desplegados en la búsqueda para recapturar a los internos, entre los que se encuentra Yorvis López (alias Oriente), una de las personas que mantenía retenidas en contra de su voluntad a la mayoría de la población de El Rodeo II.
Enfrentarán a las mafias carcelarias
El ministro El Aissami aseveró que el ingreso de armas a los penales será enfrentado con firmeza y no permitirán que funcionarios se presten a hechos de corrupción que pongan en riesgo la vida de los privados de libertad.
“Es inconcebible que un funcionario se preste para cometer actos de corrupción. Evidentemente ese tema es una responsabilidad nuestra y será asumido con firmeza para enfrentar a las mafias que operan alrededor de los penales en donde están involucrados funcionarios de la custodia externa, funcionarios del ministerio y personal administrativo, esas armas de fuego no las meten los familiares”, detalló.
Recordó de uno de los directores de El Rodeo está privado de libertad y otro está prófugo, también hay varios funcionarios solicitados por el Ministerio Público por permitir la entrada de armamento a los centros de reclusión.
Insistió que los funcionarios que trabajan en esta área deben tener una vocación moral.
Transitar por un nuevo modelo de justicia
El representante del Despacho de Interior y Justicia recordó que el sistema penitenciario venezolano arrastra graves problemas y que el Gobierno Nacional está trabajando en el mejoramiento de las cárceles del país y en la aplicación de un nuevo modelo de justicia que ofrezca condiciones óptimas a los privados de libertad.
Planteó la necesidad de desarrollar estándares de sanciones y penas que dependan del delito cometido para disminuir el hacinamiento en los centros de reclusión. Informó que en el país la tasa de encarcelamiento es de 170 presos por cada 100 mil habitantes y cerca de 70% de la población penitenciaria está en la fase de procesamiento.
“Estamos obligados a transformar el sistema de justicia y buscar fórmulas alternativas a la privativa de libertad”, sentenció.
Refirió que el Código Orgánico Penitenciario establece una nueva doctrina penitenciaria, las bases de una nueva institucionalidad y desarrolla un conjunto de procedimientos técnicos y operativos para la trasformación del sistema carcelario
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