CARLOS LÓPEZ
Credito: Agencias
26 de abril de 2013.- Este 1º de mayo se realizará en Caracas una gran marcha con motivo del Día Internacional del Trabajador, en respaldo al presidente obrero, Nicolás Maduro, y en defensa de las reivindicaciones laborales que aportó el líder supremo de la revolución, Hugo Chávez.
Los trabajadores celebrarán también en su día la entrada en vigencia de las ocho horas laborales, lo que significa 40 horas semanales y los dos días continuos de descanso, como establece la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras.
Está previsto que sean convocados para esta movilización cerca de medio millón de venezolanos pertenecientes a la fuerza laboral del país, informó el coordinador general de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (CBST), Carlos López.
Indicó en rueda de prensa que aún se evalúa el recorrido que se realizará. En principio, se prevé como punto de partida la avenida Francisco de Miranda, a la altura del parque del Este Generalísimo Francisco de Miranda, a partir de las 8:00 de la mañana, hasta llegar a la avenida Bolívar.
López recordó que los trabajadores estarán acompañados por el presidente de la República, Nicolás Maduro.
El coordinador general de la CBST manifestó igualmente su rechazo a la campaña golpista que gesta el candidato perdedor de las pasadas elecciones presidenciales, Henrique Capriles Radonski, quien intenta involucrar en una nueva etapa a los trabajadores de la Administración Pública.
"En Venezuela no existe ni un despedido por razones políticas", expresó López con indignación sobre las denuncias irresponsables de Capriles, quien ha insistido en crear una matriz sobre supuestos despidos masivos: "No se ha recibido ni una denuncia de despido. Es falso".
Resaltó que Venezuela ha sido un ejemplo para el mundo en estos últimos 14 años en lo que a reivindicaciones laborales se trata: aumento anual del salario mínimo; una ley garante de los derechos de los trabajadores y un Jefe de Estado que proviene del sector obrero venezolano.
Todo ello contrasta con lo que vivía este sector en las décadas de 1990: el ejemplo es la pérdida del carácter retroactivo de las prestaciones sociales, una reivindicación eliminada por las cúpulas empresariales y sindicales, que fue propiciada por el gobierno de Rafael Caldera.
La propuesta que eliminaría el carácter retroactivo de las prestaciones se negoció en una comisión tripartita conformada por Fedecámaras, la Confederación de Trabajadores de Venezuela y Teodoro Petkoff, este último como representante del gobierno de Caldera.
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