Eleazar Díaz Rangel
Caracas, 27 Febr. AVN .- Tras analizar el tratamiento informativo de las agencias internacionales sobre los sucesos en Libia, el director del diario Últimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel, concluyó que “buscar y escribir la verdad no fue la norma ética de muchos periodistas y medios” en el país africano.
En su columna dominical, Díaz Rangel destacó que en los primeros días del conflicto político generado por la oposición en contra del líder libio, Muammar Al Gaddafi, la información difundida estaba destinada a afectar la imagen del mandatario “y favorecer a quienes se habían sublevado”.
“No ha privado en esos corresponsales el esfuerzo por difundir la realidad por cuanto ocurría. Difundían especies y rumores sin confirmación alguna”, indicó el periodista, quien recordó las noticias sobre bombardeos y muertes que transmitían medios como Arabiya Tv y Al Jazira pero “no presentaron ninguna imagen” y “cinco días después no las habían podido ofrecer”.
“Alguna agencia explicó que leales a Kadafi ¡habían limpiado las calles y escondido los escombros! ¿Y cómo es que ningún edificio resultara dañado? Todo eso lo habían dicho “testigos” no identificados, por supuesto”, puntualizó el director del rotativo, al tiempo que recalcó que las agencias de noticias “ejecutan sus políticas informativas en armonía con los intereses geopolíticos de sus respectivos países”.
“Lo que es bueno para EEUU es bueno para la AP y CNN; se puede repetir con Inglaterra y la Reuters, Francia y la AFP y con la mayoría de las agencias. Naturalmente, los cambios en la política mundial se han venido reflejando en los intereses de las agencias y servicios”, puntualizó Rangel en su artículo, que enfatiza que Libia “cuenta con las mayores reservas de petróleo de África” y es un “importante proveedor de EEUU y Europa”.
“Parece posible la caída de Kadafi, con o sin intervención militar extranjera, con la presencia o no de la ONU. Si esto ocurre, la presa mayor será el petróleo libio, uno de los más livianos del mundo. Codiciado por las potencias occidentales”, sostuvo el periodista.
Caracas, 27 Febr. AVN .- Tras analizar el tratamiento informativo de las agencias internacionales sobre los sucesos en Libia, el director del diario Últimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel, concluyó que “buscar y escribir la verdad no fue la norma ética de muchos periodistas y medios” en el país africano.
En su columna dominical, Díaz Rangel destacó que en los primeros días del conflicto político generado por la oposición en contra del líder libio, Muammar Al Gaddafi, la información difundida estaba destinada a afectar la imagen del mandatario “y favorecer a quienes se habían sublevado”.
“No ha privado en esos corresponsales el esfuerzo por difundir la realidad por cuanto ocurría. Difundían especies y rumores sin confirmación alguna”, indicó el periodista, quien recordó las noticias sobre bombardeos y muertes que transmitían medios como Arabiya Tv y Al Jazira pero “no presentaron ninguna imagen” y “cinco días después no las habían podido ofrecer”.
“Alguna agencia explicó que leales a Kadafi ¡habían limpiado las calles y escondido los escombros! ¿Y cómo es que ningún edificio resultara dañado? Todo eso lo habían dicho “testigos” no identificados, por supuesto”, puntualizó el director del rotativo, al tiempo que recalcó que las agencias de noticias “ejecutan sus políticas informativas en armonía con los intereses geopolíticos de sus respectivos países”.
“Lo que es bueno para EEUU es bueno para la AP y CNN; se puede repetir con Inglaterra y la Reuters, Francia y la AFP y con la mayoría de las agencias. Naturalmente, los cambios en la política mundial se han venido reflejando en los intereses de las agencias y servicios”, puntualizó Rangel en su artículo, que enfatiza que Libia “cuenta con las mayores reservas de petróleo de África” y es un “importante proveedor de EEUU y Europa”.
“Parece posible la caída de Kadafi, con o sin intervención militar extranjera, con la presencia o no de la ONU. Si esto ocurre, la presa mayor será el petróleo libio, uno de los más livianos del mundo. Codiciado por las potencias occidentales”, sostuvo el periodista.
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