Caracas, 12 Jul. AVN.- Para el Gobierno Revolucionario es de suma importancia cambiar de manera radical la realidad penitenciaria y convertir a las cárceles en escuelas para la vida, para la transformación del nuevo hombre y de la nueva mujer.
La declaración la hizo este martes el ministro para Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, durante la celebración del III aniversario de la Comunidad Penitenciaria de Coro, estado Falcón.
Manifestó que el cambio del modelo penitenciario debe ampararse en una absoluta preservación de la integridad física y mental de la población interna, fundamentado siempre en el respeto a los derechos humanos.
“Nuestro camino va a ser siempre en preservación de la integridad física y de respeto absoluto e irrenunciable de los derechos humanos de la población privada de libertad”, expresó.
Asimismo, precisó que las políticas de transformación penitenciaria deben ir acompañadas con las mejoras progresivas de las instalaciones, es decir, “la adecuación de los espacios físicos para la vida digna dentro de los internados judiciales, la atención especial a grupos diferenciados, personas con discapacidad, personas enfermas, madres solteras y grupos focales vulnerables”.
Primeros núcleos de Misión Trabajo Venezuela
la reciente Misión Trabajo Venezuela”.
“Nuestras cárceles deben ser la génesis del trabajo liberador, de la educación liberadora, de la música liberadora, del nuevo hombre, de la nueva mujer, ese es el reto que tenemos como revolucionarios y como socialistas dentro de los espacios penitenciarios”, subrayó.
En este sentido, destacó que sumada a la voluntad del Gobierno Nacional, debe involucrarse fundamentalmente “la participación ciudadana, la corresponsabilidad entre los poderes, la proporcionalidad, los principios de legalidad, en fin, todos los principios rectores de un nuevo modelo humanista”
Voluntad y políticas firmes
El Ministro expresó que es importante dar a conocer todas las políticas emprendidas por el Ejecutivo Nacional para cambiar la realidad oscura de los centros penitenciarios, situación que fue heredada por la falta de voluntad y desatención de los gobiernos anteriores.
“Es importante que el país conozca lo que se ha hecho en tiempo de revolución en el ámbito penitenciario. Es cierto, si tenemos fallas, pero no se puede negar la voluntad política, firme y resuelta de un gobierno que ha venido dándole prioridad al sistema penitenciario como nunca antes gobierno alguno había dado”, agregó.
En este sentido, indicó que a medida que se van aplicando las políticas para la humanización del sistema penitenciario, se debe hacer un esfuerzo mayor por dar soluciones a los internos que se encuentran en situación de procesados.
“La situación jurídica de los internos es una realidad que nos golpea con mucha fuerza, casi 70% de la población se encuentra en fase de procesado. Necesitamos que que la persona se acerque cada vez más hacia su reencuentro con la libertad, con su familia, como hombres y mujeres nuevas”, agregó.
Comunidad Penitenciaria de Coro: Vanguardia del modelo
Entretanto, el ministro de Interior y Justicia felicitó a la comunidad penitenciaria de Coro, tanto internos como a directivos y trabajadores, por mostrarle al país, como debe ser un centro de reclusión, donde la vida, el trabajo y la educación abran las puertas a un nuevo camino y a una nueva vida a las personas que ingresen en estos recintos.
“Ustedes son vanguardia del modelo penitenciario venezolano, de ustedes depende la esperanza de todo el resto de la población privada de libertad para lograr transformar ese modelo y convertir todas las cárceles en lo que hoy día es la comunidad penitenciaria de Coro. Ese es el desafío histórico que hoy tenemos en tiempo de Revolución”, acotó El Aissami.
“Felicitamos a toda la comunidad penitenciaria de Coro. Sepan ustedes que el camino recién comienza porque hay mucho por hacer y mucho por transformar, pero este es el camino que nos va a llevar a un puerto feliz”, manifestó el titular del MIJ.
Destacó que cambiar el modelo penitenciario es posible, pues lo que se evidencia en el internado de Coro es fruto palpable de la voluntad de un pueblo y un gobierno que desean transformar la realidad en beneficio de todos.
Al respecto, El Aissami apuntó como ejemplo que el 100% población privada de libertad en Coro está dentro de programas culturales, deportivos, educativos, entre otros, “lo que los ha convertido en los mejores internos que tenemos en el país. Por eso nuestro apoyo y reconocimiento permanente”.
“Necesitamos vencer los vicios, las malas prácticas y el pasado oscuro que hemos heredado pero que estamos transformando”, argumentó el ministro El Aissami.
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