Con Síndrome de Down, este joven prodigio de la música clásica hecha en Venezuela suele matizar la interpretación académica con toques de ritmos tradicionales venezolanos. Él es el único director de orquesta en Venezuela con esta discapacidad.
La Quinta Sinfonía de (Ludwig van) Beethoven es su pieza musical preferida, y se confiesa admirador de los directores venezolanos José Antonio Abreu y Gustavo Dudamel.
Este merideño, con tan sólo cuatro años de edad ingresó al Programa Educativo Experimental para niños con necesidades especiales y de desarrollo normal (1986-1988), perteneciente a la Asociación Merideña de Padres y Amigos de Niños Excepcionales (Amepane).
En su corta carrera ha conquistado numerosos escenarios, nacionales e internacionales, y se ha alzado con múltiples reconocimientos, como la Orden José Félix Ribas en su Segunda Clase por el Consejo Legislativo del estado Mérida, así como la medalla de reconocimiento otorgada por Pdvsa La Estancia, entre otros.
Además, Dávila participó como director en la inauguración del Meeting International Special Olympics Figueres 2010, realizado en España.
Sobre este talento nacional, la presidenta de Pdvsa La Estancia, Beatrice Sansó de Ramírez, expresó que este tipo de eventos exaltan la riqueza humana venezolana.
“Hoy Pdvsa La Estancia y Venezuela están de gala, porque existe este niño que tiene condiciones distintas, con Síndrome de Down, pero que nos ha demostrado que podemos llegar muy lejos, con un poquito de tenacidad, de esfuerzo, pero sobre todo con mucho amor”, destacó, en un pase televisivo con Venezolana de Televisión.
Asimismo, aplaudió la actuación de los 125 niños que conforman la Orquesta Sinfónica Infantil Núcleo La Rinconada, quienes junto a José Omar Dávila hicieron posible el espectáculo musical para deleitar al público asistente.
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