El presidente de la República, Nicolás Maduro, realizó un conversatorio para interactuar con voceros del movimiento estudiantil universitario, en el marco de la marcha por la paz. La intención fue que los jóvenes que apuestan al desarrollo del país pudieran presentar propuestas, expectativas y denuncias sobre el ámbito universitario.
Como líder estudiantil, tomó el derecho a palabra Jenifer Mujica, estudiante de la Universidad Central de Venezuela (UCV), quien denunció contundentemente que en esa casa de estudio “no hay democracia”, ya que las autoridades que la dirigen son dictatoriales en sus decisiones y acciones.
Maduro, como jefe de Estado, esgrimió: “Esto es un buen punto para discutir con el movimiento estudiantil nacional, para que se una, se ponga de acuerdo y que se haga una marcha para exigir voto paritario, democracia universitaria, y que los rectores rindan cuentas cada seis meses del presupuesto que les da el Estado”.
Por su parte, Domiciano Graterol, Consejero Universitario del Instituto Tecnológico Alfonso Camero, detalló que no apoya las expulsiones que han sufrido varios de sus compañeros.
El Presidente manifestó que, bajo ningún concepto, se pueden aceptar las expulsiones. “El derecho al estudio es un derecho constitucional y por encima de la constitución no hay rector ni nadie que valga”. Al mismo tiempo, le indicó a los presentes que hicieran la lista de todos los dirigentes universitarios perseguidos por las autoridades universitarias para “denunciarlos”.
Colectivos de izquierda de la UCV
La Coordinadora de los colectivos de izquierda en la UCV, Kristel Velázquez, agradeció la oportunidad de diálogo y de formación que ha ofrecido el Presidente. Por otro lado, criticó el vandalismo y la violencia desatada en el país por la derecha venezolana.
Esta joven hizo un llamado para que todos los sectores estudiantiles, sin importar el tinte político, puedan abrir espacios al debate y llegar a acuerdos que vayan en función del crecimiento de la nación en todos los ámbitos sociales.
Velázquez también aprovechó la oportunidad para denunciar que el comedor universitario, de una de las casas de estudio más importantes del país, la UCV, tiene dos meses sin funcionar por motivo de reparaciones que nunca se culminaron.
El Primer Mandatario expresó que no sabía del hecho y que a la Universidad Central se le dieron los recursos del Estado, “hasta el último centavo”.
“Hay que meter a la fiscalía y la contraloría a investigar (…) eso es corrupción“. El Presidente invitó a seguir conversando sobre las denuncias en la Conferencia Conjunta de Paz y sugirió a todo el movimiento estudiantil de la UCV a que realice una marcha para exigir clases ya. Culminó la reunión calificando al movimiento estudiantil como “dueños del presente” y “la esperanza de la patria”.
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