Quién iba a pensar que a mis 68 años
de edad, el domingo 20 de mayo del 2012, a las 8 de la noche, haría un nuevo
debut como interprete danzario, en el esplendoroso escenario del Teatro Teresa
Carreño.
Se trató del estreno
de mi última creación artística EPITAFIO
NOCTURNAL:
Es de noche, en una
tumba de un camposanto cualquiera, alumbrado por una plateada luna que lo
atraviesa, se consuma una transfiguración espiritual de dos seres que
profundamente se amaron…….
Uno de ellos, en el
albor de una pujante juventud, perece vilmente asesinado…
El otro, en la plenitud
de una estación otoñal, a manera de
lápida mortuoria le rinde un póstumo homenaje…..
En esta invención
coreográfica reuní varios valores artísticos: música de Donizetti y Kítaro, el
poema El Silencio de Andrés Eloy Blanco, el Grito de la pintura de Munch, el
Pensador de la escultura de Rodín, movimientos de danza de Grishka Holguín y
Sonia Sanoja, y en la escenografía y vestuario elementos del arte Kitsch.
Epitafio Nocturnal es
en homenaje póstumo a mi entrañable compañero Wilfredo Salazar, donde confieso
mi eterna fidelidad afectiva, a un noble ser humano que en vida y después de su
fallecimiento transformó mi vida.
El estreno de Epitafio
Nocturnal, tuvo como marco programático el 8º
FESTIVAL MUNDIAL DE SOLOS Y DUETOS 2012, realizado en Caracas del 19 al 27
de mayo, con la participación de Finlandia, España, Méjico, Paraguay, Uruguay,
Cuba y Venezuela.
Confieso que este
acontecimiento cultural, es quizás el mayor reto que he tenido que asumir en mi
trayectoria artística.
Confieso que antes de
salir a ese majestuoso espacio teatral, sentí terror escénico, y que en el
tiempo de la coreografía que antecedió mi actuación, tuve que realizar
profundos ejercicios de respiración, los cuales me armaron de fuerza, valentía
y vigor, para plantarme en medio de aquella inmensa sabana y expresar entre
movimientos y sollozos, aquí está Rodolfo Varela con su EPITAFIO NOCTURNAL.
Rodolfo Varela / Cumaná 29 de mayo 2012
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