SIRIA: MIENTRAS LA LIGA ÁRABE SE DIVIDE, OCCIDENTE LUSTRA SUS ARMAS

Última actualización: 26 ene 2012 | MSK  

Al menos 50 personas perecieron durante los recientes enfrentamientos en Siria, situación que motiva a que la comunidad internacional discrepe aún más a la hora de proponer soluciones al conflicto que ya lleva 11 meses en ese país.

Pese a que Damasco se comprometió a "completar la cooperación" con la misión de la Liga Árabe, este miércoles el organismo retiró a 55 observadores de territorio sirio, en protesta por la negativa del régimen de Bashar al Assad a detener la represión.

Tras la salida de este grupo, son 110 los observadores que quedan en Siria, según informó la propia Liga. Además, este organismo pidió la intervención del Consejo de Seguridad de la ONU, para que respalde el proyecto que prevé el cambio de poder en ese país.

Entre tanto, los expertos hablan sobre las tentaciones de la Liga de imponer a Siria un escenario similar al de Yemen, algo que no funcionaría y que de esta manera cierra las posibilidades de diálogo con Damasco.

"Oriente no puede hablar de Siria. Lo tiene abandonado a su propia suerte y todo el mundo está observando cuál será el resultado. La Liga le ha cerrado la puerta. Siria y su diplomacia darían cualquier cosa para ayudar a los sirios, pero la última decisión depende del mismo pueblo: ni la Liga, ni cualquier otra organización podrán hacer nada. El diálogo entre el Gobierno y la oposición es primordial", afirma el analista político sirio Bassam Abu Abdalah.

Occidente intenta llevar el caso al Consejo de Seguridad

Mientras tanto, otros describieron un escenario aún más "oscuro", y es que la Liga Árabe ha jugado un papel clave en la regulación del conflicto sirio en el ámbito internacional. Ahora las opiniones de sus miembros han divergido; esto, según expertos, es justamente lo que necesitaban ciertos países occidentales para intentar llevar la discusión del "caso sirio" al Consejo de Seguridad de la ONU e intervenir militarmente.

"Los estados miembros del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo, bajo presión de Occidente, han decidido retirarse de la misión en Siria, justificando de ese modo su completa ineficacia. Al mismo tiempo, eso divide a la Liga Árabe lo que me parece muy inoportuno. La paz y democracia en Siria no se podrá conseguir a través de la presión de la OTAN o los bombardeos", asegura el parlamentario laborista británico Jeremy Corbyn.

Sin embargo, los recientes cambios en torno al diálogo entre Damasco y la Liga Árabe crearían las condiciones necesarias para un "escenario libio". Algo que confirman muchos expertos, señalando que el modelo yemení, al que se refieren los representantes del organismo arábico en su nuevo plan para Siria, no puede servir como ejemplo ya que simplemente no funciona.

"El modelo de Yemen, donde fue negociado un tipo de trato, no funciona. Allí no vemos ningún movimiento en dirección positiva. Pero el foco de atención de Occidente se ha centrado en Siria. La Liga se convierte en un instrumento de manipulación que hostiga al país exclusivamente por cuestiones políticas", comenta la analista Sarah Marusek.

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