Caracas, 09 Febr. AVN .- Sordos para escuchar los avances de la Revolución Bolivariana en política exterior y mudos para hablar en defensa de los estafados por empresas inmobiliarias o los afectados por las lluvias, fue la característica más notoria de la derecha parlamentaria, representada por los 65 diputados, durante la comparecencia del vicepresidente Elías Jaua, y otros ministros, ante la Asamblea Nacional (AN).
En total, la derecha parlamentaria formuló 10 preguntas. Casi todas giraron en torno a la lucha contra el crimen y algunas sobre el equipamiento militar para defender la soberanía de la Patria.
Cada interrogante fue respondida por los Ministros de Defensa y Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro y Carlos Mata Figueroa, con detalles, gráficos, avances, retos y hasta con errores admitidos por parte de estos altos funcionarios.
Aún así, la derecha insistía en su sordera, por lo que en varias ocasiones el vicepresidente de la República, Elías Jaua, los invitó a respetar al pueblo que observaba por televisión el debate.
“Dimos citas, aportamos datos de interés con gráficas y demás. El ministro del Interior (Tareck El Aissami) ha profundizado y dado resultados. El ministro de la Defensa (Carlos Mata Figueroa) ha explicado, como nunca nadie lo ha hecho, los aspectos relativos a la Fuerza Armada. Vemos que dicen recurrentemente que no hemos respondido a las interrogantes. Creo que hemos respondido cada uno de los planteamientos, no podemos satisfacer lo que no se nos ha preguntado”, dijo Jaua.
Sin embargo, parlamentarios de derecha manipularon cifras y se negaban a admitir los logros del proceso de cambios que vive el país.
Los altos funcionarios del Gobierno Bolivariano no desmayaron es recordarles, durante más de seis horas, que hicieran política con una ética en el discurso. Esta dosis surtió un poco de efecto cuando el diputado Juan Carlos Caldera, reconoció que sí era verdad “aquello” de la buena gestión de la Policía Nacional Bolivariana.
Pero, oponerse a cualquier logro de la Revolución Bolivariana fue el sello de la derecha parlamentaria, sin importar si resultaba un beneficio para el pueblo, como fue el caso de las estafas inmobiliarias, en el que Gobierno Nacional reivindicó a la clase media su derecho a tener una vivienda propia.
Al respecto, los 65 diputados, en la sesión parlamentaria, nunca se interesaron en defender los intereses de los estafados, ni muchos por preguntar sobre la defensa que asumió el Gobierno Nacional.
Con el problema de la inseguridad intentaron levantar una trinchera de “lucha moral”. No en vano, un diputado de del partido de derecha Un Nuevo Tiempo (UNT), Willian Barrientos, "exigió" al Gobierno nacional, sin datos reales, más "ética y moral" sobre esta materia.
La respuesta del Ministro Tareck El Aissami fue que, por respeto al dolor y la tristeza de la familia de Claudio Macías, UNT no tiene moral ni ética para exigir avances sobre el tema de la criminalidad del país, después que propusieron para la directiva del Parlamento a José Sánchez, alias "Mazuco", quien fue sentenciado a 19 años de prisión por estar involucrado directamente en el homicidio del funcionario policial.
Esta verdad irrefutable produjo el levantamiento furioso de sus curules de los diputados Julio Montoya, Enrique Márquez y Elías Mata, quienes perdieron los estribos al sabotear por minutos la sesión parlamentaria.
Ante la falta de argumentos, el discurso de la derecha en la AN se fue desinflando conforme transcurrió la tarde, por lo que la mentira se desplegó con más fuerza entre los 65 parlamentarios.
Fue, entonces, el turno del diputado Rodolfo Rodríguez, de Acción Democrática, quien acusó al Gobierno de supuestamente de “regalar” dinero al Alba.
“Puede ser porque usted se la pasa en Miami, porque usted vive en Miami y tengo las pruebas de eso, quizá usted no sepa lo que está pasando en el país porque usted abandonó a los electores que votaron por usted. Se fue a Miami y regresó ahorita el 1 de febrero. Es una explicación que le busco a la mentira que usted acaba de decir”, le contestó el Ministro de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro.
La sordera continuó, incluso, a la salida de las sesión cuando la diputada Maria Corina Machado, fiel al estilo de manejar sus propias cifras como lo hizo en la organización política Súmate, negó, por ejemplo, la veracidad de los números en materia lucha contra la inseguridad mostrados por el titular de Relaciones Interiores, Tareck El Aissami, y aseguró simplemente que “son maquillados”.
En esta sordera parlamentaria ni siquiera el Padre de la Patria mereció respeto por parte de los diputados de la derecha. Cuando fue presentado el resultado parcial de las investigaciones científicas sobre los restos de El Libertador Simón Bolívar los aplausos resonaron en el bloque revolucionario, mientras que los diputados ubicados, precisamente, a la derecha del presidio guardaron silencio.
Algunos de ellos pareció dudar. Pero se mantuvieron imperturbables, fieles a lo que parece ser un acuerdo de no aplaudir ni sonreír ante el patriotismo que desbordaba en el hemiciclo en ese momento.
"¡Esta gente no aplaude ni a Bolívar, chico! ¡Se trata de Bolívar! ¡Es el colmo! ¡No es cosa de chavistas o escuálidos!”, soltó indignado un funcionario de seguridad de la AN.
Frente a esta “ofuscación” de la derecha parlamentaria, el Canciller Maduro resumió en una frase lo que seguirá siendo la acción del Ejecutivo Nacional: “Nosotros insistiremos hasta la terquedad hasta que ustedes escuchen”.
En total, la derecha parlamentaria formuló 10 preguntas. Casi todas giraron en torno a la lucha contra el crimen y algunas sobre el equipamiento militar para defender la soberanía de la Patria.
Cada interrogante fue respondida por los Ministros de Defensa y Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro y Carlos Mata Figueroa, con detalles, gráficos, avances, retos y hasta con errores admitidos por parte de estos altos funcionarios.
Aún así, la derecha insistía en su sordera, por lo que en varias ocasiones el vicepresidente de la República, Elías Jaua, los invitó a respetar al pueblo que observaba por televisión el debate.
“Dimos citas, aportamos datos de interés con gráficas y demás. El ministro del Interior (Tareck El Aissami) ha profundizado y dado resultados. El ministro de la Defensa (Carlos Mata Figueroa) ha explicado, como nunca nadie lo ha hecho, los aspectos relativos a la Fuerza Armada. Vemos que dicen recurrentemente que no hemos respondido a las interrogantes. Creo que hemos respondido cada uno de los planteamientos, no podemos satisfacer lo que no se nos ha preguntado”, dijo Jaua.
Sin embargo, parlamentarios de derecha manipularon cifras y se negaban a admitir los logros del proceso de cambios que vive el país.
Los altos funcionarios del Gobierno Bolivariano no desmayaron es recordarles, durante más de seis horas, que hicieran política con una ética en el discurso. Esta dosis surtió un poco de efecto cuando el diputado Juan Carlos Caldera, reconoció que sí era verdad “aquello” de la buena gestión de la Policía Nacional Bolivariana.
Pero, oponerse a cualquier logro de la Revolución Bolivariana fue el sello de la derecha parlamentaria, sin importar si resultaba un beneficio para el pueblo, como fue el caso de las estafas inmobiliarias, en el que Gobierno Nacional reivindicó a la clase media su derecho a tener una vivienda propia.
Al respecto, los 65 diputados, en la sesión parlamentaria, nunca se interesaron en defender los intereses de los estafados, ni muchos por preguntar sobre la defensa que asumió el Gobierno Nacional.
Con el problema de la inseguridad intentaron levantar una trinchera de “lucha moral”. No en vano, un diputado de del partido de derecha Un Nuevo Tiempo (UNT), Willian Barrientos, "exigió" al Gobierno nacional, sin datos reales, más "ética y moral" sobre esta materia.
La respuesta del Ministro Tareck El Aissami fue que, por respeto al dolor y la tristeza de la familia de Claudio Macías, UNT no tiene moral ni ética para exigir avances sobre el tema de la criminalidad del país, después que propusieron para la directiva del Parlamento a José Sánchez, alias "Mazuco", quien fue sentenciado a 19 años de prisión por estar involucrado directamente en el homicidio del funcionario policial.
Esta verdad irrefutable produjo el levantamiento furioso de sus curules de los diputados Julio Montoya, Enrique Márquez y Elías Mata, quienes perdieron los estribos al sabotear por minutos la sesión parlamentaria.
Ante la falta de argumentos, el discurso de la derecha en la AN se fue desinflando conforme transcurrió la tarde, por lo que la mentira se desplegó con más fuerza entre los 65 parlamentarios.
Fue, entonces, el turno del diputado Rodolfo Rodríguez, de Acción Democrática, quien acusó al Gobierno de supuestamente de “regalar” dinero al Alba.
“Puede ser porque usted se la pasa en Miami, porque usted vive en Miami y tengo las pruebas de eso, quizá usted no sepa lo que está pasando en el país porque usted abandonó a los electores que votaron por usted. Se fue a Miami y regresó ahorita el 1 de febrero. Es una explicación que le busco a la mentira que usted acaba de decir”, le contestó el Ministro de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro.
La sordera continuó, incluso, a la salida de las sesión cuando la diputada Maria Corina Machado, fiel al estilo de manejar sus propias cifras como lo hizo en la organización política Súmate, negó, por ejemplo, la veracidad de los números en materia lucha contra la inseguridad mostrados por el titular de Relaciones Interiores, Tareck El Aissami, y aseguró simplemente que “son maquillados”.
En esta sordera parlamentaria ni siquiera el Padre de la Patria mereció respeto por parte de los diputados de la derecha. Cuando fue presentado el resultado parcial de las investigaciones científicas sobre los restos de El Libertador Simón Bolívar los aplausos resonaron en el bloque revolucionario, mientras que los diputados ubicados, precisamente, a la derecha del presidio guardaron silencio.
Algunos de ellos pareció dudar. Pero se mantuvieron imperturbables, fieles a lo que parece ser un acuerdo de no aplaudir ni sonreír ante el patriotismo que desbordaba en el hemiciclo en ese momento.
"¡Esta gente no aplaude ni a Bolívar, chico! ¡Se trata de Bolívar! ¡Es el colmo! ¡No es cosa de chavistas o escuálidos!”, soltó indignado un funcionario de seguridad de la AN.
Frente a esta “ofuscación” de la derecha parlamentaria, el Canciller Maduro resumió en una frase lo que seguirá siendo la acción del Ejecutivo Nacional: “Nosotros insistiremos hasta la terquedad hasta que ustedes escuchen”.
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