Ese es el caso de Nelson Torrealba, conocido sacerdote que oficia misas en diversas parroquias de este estado de la región Centro-Occidental del país.
“En ningún Gobierno venezolano ha habido tanta seguridad social”, como en el proceso revolucionario liderado por el presidente Hugo Chávez Frías, expresó Torrealba, que también es doctor en teología.
Torrealba resaltó los avances en materia de educación, salud, superación de la pobreza y en el ámbito deportivo, entre otras áreas.
Indicó que estos avances los “puede observar cualquiera persona con objetividad”. Recordó que “nadie se había metido a fondo” en los barrios, como lo ha realizado la Revolución Bolivariana a través de la Misión Barrio Adentro.
Esta misión social ha logrado llegar “a los lugares más apartados” del país, tanto en el ámbito rural como en el urbano. “El pobre sabe lo que significa eso”, agregó el sacerdote en relación a los beneficios sociales de estas misiones.
“¿Qué hay fallas"”, se pregunto y dio él mismo la respuesta: “Nada es perfecto”, pero dijo que tampoco se “pueden negar los avances educativos, de salud y en materia de superación de la pobreza”, puntualizó.
Manifestó que esto último lo reconoce la propia Organización de las Naciones Unidas (ONU), que ha destacado a Venezuela como una de las pocas naciones, que trabaja seriamente en conseguir las Metas del Milenio.
Esta obra social impulsada por el Gobierno revolucionario es reconocida por otros destacados sacerdotes de esta región, como es el caso del padre Adolfo Rojas, Oscar Freitez y Miguel Matos, entre otros.
Por las razones antes mencionadas, Torrealba dijo que resultan mezquinas las polémicas declaraciones del Cardenal Jorge Urosa Sabino y otros jerarcas de la iglesia católica venezolana, emitidas recientemente en contra del presidente de la República, Hugo Chávez, y el proceso revolucionario.
Señaló que las expresiones del presidente de la República, Hugo Chávez Frías, en contra del Cardenal, han resultado fuertes, pero que tampoco fueron menos duras las primeras declaraciones emitidas por el Cardenal en contra del Presidente.
El sacerdote resaltó que es amigo de ambos, del presidente de la República y del Cardenal, pero reconoció que la jerarquía de la Iglesia católica y Urosa Sabino, han expresado “críticas graves” en contra del Presidente.
Consideró que las opiniones de la jerarquía eclesiástica, y del propio Cardenal, no se ajustan a la verdad del proceso de transformación social que se vive en Venezuela, y tampoco hacen justicia al líder de este proceso, el presidente Hugo Chávez
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