Chavez en la web

viernes, octubre 01, 2010

ECUADOR: RESCATADO PRESIDENTE RAFAEL CORREA

La Voz De San Joaquin
Fuente: Redacción Elcomercio.com (Ecuador)
Los soldados de boínas rojas y botas cafés se desplegaron sobre el asfalto, en la avenida Mariana de Jesús, y no dudaron: respondieron con sus M-16 al fuego abierto por policías insubordinados, quienes por cerca de 10 horas cercaron al Hospital de la Policía, donde se encontraba el presidente Rafael Correa.
La balacera, que duró más de 40 minutos, despejó la avenida y arrinconó a los uniformados que desde las 07:30 se habían declarado en huelga en el Regimiento Quito 1 (RQ-1), tras la aprobación parcial de la Ley Orgánica de Servicio Público.El presidente Correa llegó al Hospital de la Policía pasadas las 10:40, luego de ser ultrajado por policías del RQ-1, contiguo a la casa de salud. Aquellos uniformados demandaban que se preserven los reconocimientos económicos por ascensos.
En la casa de salud, el Mandatario fue atendido por asfixia y lesiones. Sin embargo, no pudo salir de allí. Pasadas las 13:00, el Ejecutivo decretó el “estado de excepción” en el país. Entonces, simpatizantes del Presidente, que se habían reunido en la Plaza de la Independencia, avanzaron al Hospital, en lo que definieron como un intento de “rescate” del Jefe de Estado.
Pero los mandos de los policías insubordinados dieron la orden de utilizar el equipo antimotines -del rastrillo del Regimiento Quito 1- y se enfrentaron con la gente. Reducían a cualquier persona que rechazara su protesta y lanzaban gas pimienta.
El segundo intento de rescate del Presidente se registró pasadas las 20:10, cuando un piquete del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) de la élite policial llegó al exterior del Hospital. Tras enfrentarse a bala con los sublevados logró ingresar por el área de emergencia.
Ahí los esperaban varios policías cubiertos el rostro con camisetas y pañuelos con colores de la bandera de Ecuador. Uno de ellos desenfundó la pistola 9 milímetros de dotación y disparó contra el grupo de élite. “De aquí solo me sacan muerto”, gritó, al tiempo que se resguardaba en una columna de cemento.
Los miembros del GIR respondieron el fuego con fusiles de asalto. “Somos policías no disparen” , alcanzó a decir el oficial que comandaba el operativo de rescate, pero el sonido de los casquillos tocando el piso era cada vez más intenso.
Los miembros del GIR se abrieron paso con escudos y rompieron el vidrio de la entrada del hospital. Subieron al tercer piso, donde se encontraba el Presidente, y se reunieron con él a puerta cerrada para explicarle cómo saldrían del edificio.Tuvieron que negociar su salida con los policías sublevados que custodiaban ese piso desde la mañana. Luego, el Presiente bajó por las escaleras de emergencia junto a varios asambleístas y ministros de Estado.
El piquete del GIR formó dos columnas e intentaron salir con el Mandatario en el medio. Los sublevados se percataron de la acción y dispararon. Los uniformados del GIR tuvieron que retroceder varios metros.
Esperaron unos 15 minutos y volvieron a intentar sacar al Presidente, pero esta vez apagaron las luces de la entrada de emergencia. A las 21:30 subieron al Mandatario a un Jeep 4x4 gris sin placas, con vidrios polarizados, y lo sacaron en medio de un cruce de balas. Para abrirse camino arrojaron bombas lacrimógenas y detonaron explosivos de baja intensidad. Varios uniformados escoltaron el vehículo hasta la av. Mariana de Jesús.
En medio del enfrentamiento, el policía del GIR, Froylán Jiménez, recibió un impacto de bala y cayó al piso. Paramédicos lo atendieron y trasladaron en una camilla hasta emergencias.
Allí, cuatro enfermeras trataron de salvarle la vida; le colocaron suero y lo prepararon para una transfusión de sangre, pero falleció. La noticia enfureció al personal del GIR, que se quedó en el sitio. Ellos se concentraron en uno de los pasillos del hospital y allí lloraron y dieron golpes de puño contra la pared.
“Fueron los militares, ellos le dispararon a quema ropa cuando salíamos”, dijo uno de los policías. “Esto es lo que lograste Correa, que nos enfrentemos pueblo contra pueblo”.
En el hospital aún estaba el asambleísta de País, César Rodríguez. Cuando el Presidente dejó el edificio, Rodríguez trató de salir, pero cada vez que los policías intentaban escoltarlo los sublevados disparaban.
A las 22:30, la mayoría de policías se replegó en el RQ-1 y el asambleísta y otros civiles que estuvieron atrapados en el hospital salieron. “Esto no se queda así”, dijo un gendarme. “Si no cumplen con lo que nos ofrecieron volveremos a las calles”.
Pasadas las 23:00, el jefe del Comando Conjunto de las FF.AA., Ernesto González, informó que en el rescate intervinieron francotiradores, y que los boínas rojas abrieron fuego porque la vida del Presidente corría peligro. Él dio cuenta de 27 militares lesionados. En la Policía se informó que 17 de sus uniformados resultaron heridos.
González señaló que el arribo de tanquetas militares -que patrullaban Quito anoche- obedeció al estado de excepción.

700 militares sacaron a R. Correa del hospital
Redacción Política
Un policía dentro de un carro antimotines daba la señal para que las personas que quedaron atrapadas en el fuego cruzado entre soldados y uniformados abandonaran la zona del Regimiento Quito.
Fueron minutos de calma que la gente aprovechó para escapar de esa zona de guerra. Desde las 21:00, 700 militares de la Brigada de Fuerzas Especiales del Ejército y de otras unidades de Quito montaron un operativo para rescatar al presidente Rafael Correa.
El Mandatario había cumplido más de nueve horas retenido en el Hospital de la Policía y el diálogo con los sublevados había fallado.
A las 20:00, la ministra de la Política, Doris Soliz, quiso llegar al hospital, pero fue agredida por los uniformados. La funcionaria se puso a salvo en el centro Metrópoli. Para sacarla del sitio debió usar una bata de médico.
Los policías no cesaron su protesta, pese a los ofrecimientos que se hicieron en la tarde. Con la noche, la violencia creció, los policías perdieron la cordura y agredían a cualquiera que pasaba por la calle. Dentro del hospital, los policías amotinados pedían la amnistía para todos, pero el Gobierno no cedió.
En ese momento, se dio el ultimátum, caso contrario los militares rescatarían al Jefe de Estado. Los soldados fueron recibidos con disparos y por francotiradores.
El coronel Luis Castro, jefe militar del operativo, dijo que los soldados fueron con sus boinas, pero cuando fueron recibidos a fuego, respondieron. Los estruendos de los balazos y de las bombas lacrimógenas se escucharon por más de una hora. Incluso, cuando Correa daba su discurso en Carondelet la balacera continuaba.
Los civiles que aún permanecían en la zona debieron lanzarse al piso para evitar las balas perdidas. Las luces de los edificios aledaños fueron apagadas. El caos parecía no terminar.
Hubo minutos de silencio. Pasadas las 22:00 un policía antimotines recorrió la avenida Mariana de Jesús. “Salgan, todo está tranquilo. Salgan por favor”, repetía el uniformado.

Incidente segó vida de policía
Redacción Judicial
Anoche, cerca de las 22:00, se registró un incidente entre policías y militares en las inmediaciones del Regimiento Quito 2, en el centro de Quito.
Oficiales de esa guarnición informaron a este Diario que el policía Efrén Calderón murió tras recibir un impacto de bala, disparada desde un vehículo militar que se movilizaba por el sector.
La bala atravesó su chaleco antibalas y comprometió su corazón. En el incidente resultó herido el cabo segundo Leonardo Caiza, también de la Policía. En el Hospital Eugenio Espejo confirmaron el arribo de los dos policías.
Hasta las 23:30, a esa casa de salud llegaron 20 heridos; la mayoría de ellos eran ciudadanos. Uno de ellos fue Armando Calderón Robles, funcionario de la Unidad de Archivo del Ministerio de Patrimonio, quien fue agredido por un grupo de policías.